Malena Kiss, con 25 años, partió en agosto una vez que se recibió como sicóloga de la Universidad de Buenos Aires. Este 5 de diciembre, 4 meses después y con la experiencia de haber trabajado en más de 10 asentamientos humanos del continente, vuelve a Argentina en el Día Internacional de los Voluntarios, fecha decretada por la ONU en 1997 como homenaje a los jóvenes que trabajan por la paz mundial y el desarrollo humano sostenible.

Para armar su itinerario, la joven buscó las próximas actividades que la organización TECHO, de la que forma parte en su país, tenía en algunos de los 19 países en que la institución está presente trabajando junto a pobladores y voluntarios para potenciar la autogestión de sus comunidades. Así, pasó por México, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Panamá y Colombia y registró parte de las actividades desde su perspectiva.

Malena se encargó también de registrar su experiencia a través de las redes sociales y fue sumando seguidores que compartieron sus reflexiones sobre la pobreza en América Latina. También algunas de sus experiencias, como cuando construía en México, que debía caminar más de 5 kilómetros para llegar hasta las comunidades con las que trabajaría mano a mano de voluntaria.

“Me di cuenta de que podía cambiar un poco el escenario, pero, lamentablemente, los Derechos que se atropellan, la situación de vulnerabilidad es la misma”, comenta, desde Bogotá y luego agrega, respecto del trabajo que la organización realiza: “Obviamente, tienes los condimentos de cada país, así como la situación es similar, también es la misma voluntad de los jóvenes y familias la que se mueve desde las comunidades”.

Su intención de dejar este registro fue para promover y llamar a que otros se involucren en acciones junto con sus comunidades, como una responsabilidad ciudadana que se debe promover para superar la pobreza que ataca a cerca de un tercio del continente, de acuerdo a las cifras de la Cepal.

“Para mí, principalmente es dejar de quejarse y es hacer algo para transformar la realidad. Como ciudadanos, para cambiar esto la mejor forma de decir es hacer. Pueden pasar mil eventualidades pero no importa, pero hay un ideal que supera todos esos obstáculos y muchas veces te hace sobrepasar esas cosas”, concluye.

Latinoamérica, en dinámico avance

«»Construcción en México con las pirámides de Teotihuacán como escenario. A kilómetros y kilómetros de Buenos Aires, pero en el aire había algo familiar, y me sentí como en casa.

Hay un sueño común que nos mueve: Sabemos que se puede superar la extrema pobreza. Y esto que se comparte tiene mucho más peso. Como si fueran un puente: el compromiso y los ideales acortan las distancias. No solo entre nacionalidades, también entre oportunidades. Empezamos a igualar condiciones para todos los pobladores del mundo. Porque no todos podemos elegir donde vivir, pero tenemos que poder elegir como vivir»». (“Distancias que nos acercan”. Escrito el 25 de agosto, tras las construcciones en la comunidad de Teotihuacán en México).

“Un acceso más extendido y democrático a la información abre las puertas a ejercer la ciudadanía con compromiso y responsabilidad”. (“Sin información no se puede avanzar”. El Salvador, después de un taller sobre la ley del derecho al acceso a la información pública organizado por TECHO en las comunidades de Santa Lucia-San Julián: Taller)

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