En medio de una crisis humanitaria que persiste, donde más de la mitad de la población haitiana vive en situación de pobreza, iniciativas como la de TECHO y Village Marie se convierten en un faro de esperanza. En 2025, ambas organizaciones darán un nuevo paso en su misión al construir 50 viviendas permanentes y lanzar un programa de capacitación para lideresas comunitarias, con el objetivo de expandir el modelo de autoconstrucción en distintos territorios.
TECHO Haití, y Village Marie – Haití, y lograron construir junto a los vecinos y vecinas de la comunidad 47 viviendas. Este proyecto de lleva a cabo en el Departamento Sur, en una zona afectada por un terremoto en agosto del 2021, que dejó a 270.000 personas sin hogar. Estas viviendas cuentan con servicio sanitario (baño completo, lavamanos, ducha e inodoro) el cual se conecta con la instalación de un biodigestor que les permite a las familias acceder a electricidad segura, mientras se aprovecha el abono orgánico en su totalidad.
Village Marie es una organización que cree firmemente en el poder transformador de la unidad, la solidaridad y la comunidad para resolver los problemas de la humanidad. Desde su creación, ha trabajado en Haití, construyendo aldeas autosostenibles que buscan brindar vivienda, salud, tecnología, autonomía y dignidad a las personas que viven en condiciones de vulnerabilidad, cuyos hogares fueron destruidos por el huracán Matthew en 2016. Su labor es posible gracias a la colaboración entre voluntarios y donantes, guiados por un propósito común: reconstruir comunidades desde la esperanza y la sostenibilidad.
El trabajo de Village Marie se centra en reconstruir comunidades afectadas por desastres naturales, creando entornos seguros y autosostenibles que permitan a las familias vivir con seguridad y estabilidad. En Haití, trabajan junto a los habitantes locales y con el apoyo de la sociedad civil para construir viviendas resistentes, así como espacios públicos como escuelas y centros de salud. Este enfoque no solo busca resolver las necesidades básicas inmediatas, sino también fomentar el desarrollo social y la autosuficiencia.
Su misión incluye reconstruir el tejido social, aprovechando la conexión entre las personas y la naturaleza mediante el uso de tecnologías sociales y sostenibles. En el corto plazo, Village Marie se ha propuesto construir 15 viviendas, además de instalaciones comunitarias clave, con el fin de mejorar significativamente la calidad de vida de las familias más vulnerables. Su visión a futuro es expandir este modelo a más comunidades en Haití, promoviendo la creación de negocios sociales locales que generen ingresos y establezcan un ciclo sostenible de impacto positivo.
Hasta la fecha, Village Marie ha impactado indirectamente a más de 500 personas, contando con la colaboración de más de 500 colaboradores. A través de conferencias y la difusión de su labor, han llegado a más de 5,000 personas, demostrando que un cambio significativo es posible cuando se trabaja en conjunto. Actualmente, sus esfuerzos se concentran en la comunidad de Don de l’Amitié en Duchity, un lugar donde no existen servicios básicos como agua potable o saneamiento. Sin embargo, los habitantes han desarrollado un sistema agroforestal que les permite autoabastecerse, demostrando que las soluciones sostenibles son una alternativa real a los desafíos sociales.
Jac-Ssone Alerte, su fundador, transformó su vida tras el devastador terremoto de Haití en 2010. Este evento lo llevó a cambiar su carrera de odontología a ingeniería civil, con el objetivo de regresar a Haití y contribuir a la reconstrucción de viviendas seguras para su comunidad. Siguiendo las enseñanzas de su madre, quien le inculcó la importancia de la educación y el compromiso con su comunidad, Jac-Ssone fundó una organización que se basa en la construcción participativa. Este enfoque permite que las familias colaboren en la construcción de sus propios hogares, fortaleciendo su autoestima y promoviendo la unión comunitaria. Conozca más de la historia de Jac-Ssone aquí
La historia de Village Marie es un ejemplo de cómo el propósito, la colaboración y la solidaridad pueden transformar comunidades, devolviendo la dignidad a quienes más lo necesitan. CAún hay mucho por hacer. La emergencia en el país sigue, pero con cada aldea construida se refuerza la convicción de que las soluciones sostenibles y humanas pueden transformar realidades. Te invitamos a sumarte al sueño de Jac-Ssone y ser parte del cambio en Haití.
