Este fin de semana 180 voluntarios de TECHO recorrerán diferentes zonas de la provincia ecuatoriana de Manabí -Muisne, Jama, San Vicente y Sucre-, para relevar información sobre los daños generados por el terremoto del 16 de abril. Estos datos permitirán dar paso a la siguiente fase del plan que implementa la organización, que consiste en la construcción de viviendas de emergencia junto con familias que viven en situación de pobreza y fueron afectadas por el terremoto.
En total, el plan de acción de TECHO consta de cuatro etapas. La primera es la que concluye este viernes con la última jornada de capacitación a voluntarios para el relevamiento de información. La segunda inicia este fin de semana con la movilización del primer grupo a Manabí, para la aplicación de la Encuesta rápida de caracterización de daños en viviendas y damnificados. La tercera etapa consistirá en la construcción de las viviendas de emergencia. Como última fase, se procederá al monitoreo y evaluación de los módulos habitacionales construidos. La organización proyecta que más de 600 voluntarios se involucrarán en el proceso.
Para hacer posible este trabajo y lograr una mayor cobertura, se abrió la invitación a contribuir con la labor de TECHO en Crowdrise. Además, se despliegan otras iniciativas, en alianza con distintos actores, para la recaudación de fondos. Todo lo recaudado se destinará exclusivamente a las acciones enmarcadas en la emergencia y se acompañará de la debida rendición de cuentas al finalizar el plan.
El plan de acción forma parte del esfuerzo conjunto y coordinado que realiza TECHO-Ecuador con el Hogar de Cristo, Global Shaper Guayaquil, IKKA y PCDO, en articulación con las autoridades gubernamentales locales. El objetivo de esta iniciativa es optimizar cada acción a través del intercambio de información y la adecuada distribución de las zonas de trabajo.
- El plan se implementa de manera articulada junto con otras organizaciones y autoridades gubernamentales.
TECHO ha trabajado en otros países en situaciones de emergencia entre las que destacan el terremoto en Perú (2007), Haití (2010) y Chile (2010). Actualmente también articula esfuerzos con diferentes actores en Paraguay y Chile, con motivo de las inundaciones.
